lunes, 3 de agosto de 2009

Mujer de largos cabellos

Mujer de largos cabellos. Talla en madera

La fascinación que el cuerpo desnudo, como objeto de representación artística, ha ejercido en la mente de pintores y escultores de todos los tiempos queda bien patente por las innumerables muestras de este género que abundan en museos y salas de exposiciones de todo mundo. El placer de contemplar un cuerpo bello y bien proporcionado Venus del espejo. Diego Velazquez (1599-1660). The National Galleryes algo común y natural, conforme a nuestra naturaleza humana, y algo, asimismo, perfectamente sano y saludable, en modo alguno inmoral, en mi opinión, siempre y cuando no se sobrepasen ciertos límites que nos sugiere el buen gusto.

En la pose o actitud de la joven representada en la talla, que parece estar aireando o mesando El nacimiento de Venus. William Bouguereau (1825-1905). Museo d'Orsay(esto lo dejamos a elección del espectador) su abundantísima cabellera, no vemos que haya nada obsceno u ofensivo, capaz de herir ninguna sensibilidad, pues se distingue claramente, a mi entender, que la motivación del artista ha sido puramente estética.

En efecto, esta obra es, básicamente, el intento de representar una mujer en la plenitud de su belleza corporal mientras está siendo observada. ¿Qué significa, pues, o a quién pertenece ese gran ojo que se ve en un ángulo del cuadro y que parece abarcarlo todo? Al hacerle esta pregunta a mi padre deduje que su intención era, precisamente, que todo el mundo se hiciera la misma pregunta al contemplar el cuadro, y que prefería dejarla en el aire para que cada cual hallase una respuesta acorde a su propio pensar y a su sentir. Yo, apelando a la la memoria y a la imaginación, no pude menos que evocar dos escenas, muy frecuentes y de larga tradición en el arte y la literatura, que vienen a ser símbolo o paradigma de la belleza que se expone y es observada. Me estoy refiriendo al célebre pasaje bíblico de "Susana y los viejos" y al mito trágico de Acteón. Como es posible que alguien no los conozca, voy a permitirme hacer una breve reseña:

En el episodio del libro de Daniel que contiene la historia de Susana ésta es descrita como una joven de gran virtud y singular belleza de la que se enamoran un par de viejos lujuriosos, a la sazón jueces y de hecho gobernadores del pueblo, que sorprenden y observan a escondidas a la joven, cuando ésta va a darse un baño en el jardín de su casa, e intentan obligarla a satisfacer sus viles deseos bajo la amenaza de acusarla falsamente ante la asamblea que ellos mismos presiden. Ni que decir tiene que el tiro les sale por la culata y que ni Susana cede a sus pretensiones ni ellos se salen con la suya en la acusación, lo cual es muy encomiable, aunque para ello sea preciso la intervención de la gracia divina.

Acteón era un joven muy adicto a la caza (arte en la que había sido instruido por el centauro Quirón) que un buen día sale al monte con sus perros y por azar descubre a la diosa Artemisa (Diana para los romanos) bañándose desnuda en un manantial. Al verse descubierta, la diosa, enfurecida, lo convierte en ciervo y azuza a sus propios perros contra él, los cuales, después de devorarlo sin haberlo reconocido, vagan por todo el bosque en su busca, inquietos, llamándolo con agudos gemidos, ajenos por completo a la sentencia terrible que acaban de ejecutar.



Como puede apreciarse (también podríamos añadir a los anteriores ejemplos el de Betsabé) el juego de mirar y ser mirado ha dado mucho de sí en el arte desde la antiguedad. El erotismo siempre ha estado presente de un modo más o menos velado en las producciones artísticas y, desde que la moral todavía algo decimonónica y vitoriana del Paris de 1917 obligara a clausurar una exposición del pintor Amedeo Modigliani por considerarla indecente (parece ser que el simple hecho de que el desnudo mostrara vello púbico fue lo que irritó a los transeúntes que se pararon frente al escaparate de la exposición), sin duda se han roto muchos tabúes en nuestra sociedad occidental, de modo que el campo de la libertad se ha abierto enormemente y todo parece estar permitido, hasta aquello más vulgar y de más pésimo gusto; aunque, afortunadamente, el tiempo se encarga de poner cada cosa en su sitio y lo que es "bello o valioso" termina prevaleciendo con el pasar de los años y lo "feo o abyecto" acaba donde a nadie le importa, despreciado y estéril, en el rincón más oscuro del olvido.

Esperamos, en fín, que esta "Mujer de largos cabellos" no os parezca merecedora de este último destino y que todos la hayáis visto, al menos, con cierta complacencia.OBRAS RELACIONADAS:

Dama de pelo. Talla en madera
Podéis valorar como un curioso precedente esta "Dama de pelo" realizada tiempo ha sin más vestimenta que sus propios cabellos.
Reloj con desnudo. Talla en madera
Este reloj también muestra un desnudo y resulta bastante original
Playa nudista. Talla en madera
El tema del nudismo fue tratado con amplitud en esta obra, realizada a finales de los años 70 del pasado siglo, una vez concluida la dictadura, en plena época del llamado "destape"

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